La palabra comunicación proviene del latín “comunicatio” y éste a su vez procede del sustantivo “comunico”, cuya traducción al castellano es participar en algo común. Tanto el sustantivo comunicación, como el verbo comunicar, tiene su origen en la palabra “comunis”, raíz castellana de la palabra comunidad, la cual significa la participación o relación que se da entre individuos.
EL ORIGEN DE LA COMUNICACIÓN
Las investigaciones efectuadas en torno a los lenguajes que usaba el hombre pre - histórico no han podido aportar más que algunas hipótesis sin comprobación. Las más admitidas son:TEORÍA DIVINA: aparece en el Génesis y considera el lenguaje como un don que le fue dado al hombre en el mismo momento de su creación. Al principio, según establece, existía un solo idioma que desaparece por intervención de Dios y que luego genera una máxima confusión en la Torre de Babel.
TEORÍA DE LAS EXCLAMACIONES: se fundamenta en que el hombre emite sonidos para expresar sus sentimientos, estados anímicos y emociones. Si se observa a un niño en sus primeros años, observamos que se comunica con exclamaciones. Eso debió haber ocurrido al principio y progresivamente fue asociando sonidos con personas y cosas, lo que debió originar los sustantivos y más adelante, cuando fueron avanzando en el proceso, desarrollaron los verbos para expresar las acciones.
TEORÍA ANOMATOPÉYICA: establece que el origen del lenguaje debió estar en una necesaria imitación de los sonidos que percibían. Así, por ejemplo, imitaban los sonidos de los pájaros y otros animales.
TEORÍA MECANICISTA: esta se basa en la natural tendencia del hombre a mover sus manos y los músculos faciales en su deseo de comunicarse.
Es posible que todas las hipótesis sean ciertas. Tal vez el hombre usó sonidos, gestos y exclamaciones para comunicarse. El origen divino también es fácil de aceptar para los creyentes, ya que un ser humano normal nace dotado de un aparato fonador - auditor complejo, que lo capacita para la percepción e internalización de los mensajes, en un proceso continuo de aprendizaje que sólo termina con la muerte.
Las evidencias más antiguas de la comunicación humana están sin duda en las pinturas rupestres del paleolítico superior (unos 30 mil años a.C.) y del magdaleniense (unos 15 mil años a.C.). Allí podemos inferir el pragmatismo de un sistema incipiente de numeración y el inicio del lenguaje de contenido estético que va a encontrar su más alta expresión en Egipto, unos 3 mil años a.C. Debemos añadir la escritura cuneiforme de Mesopotamia, unos 3 mil 500 años a.C., la cual nos ha proporcionado los documentos más antiguas de que disponemos.
Sin embargo, el sistema de escritura alfabética no comienza sino hasta el segundo milenio antes de Cristo, atribuido al pueblo fenicio y más concretamente al príncipe Cadmo, contemporáneo de Moisés. La existencia de Cadmo no está totalmente probada. Luego vino la transculturación greco - fenicia y greco - romana, lo que dio origen a las lenguas romances una vez terminado el Imperio de Occidente; y de allí proviene nuestro lenguaje español.
En este sentido, es conveniente recordar que el lenguaje es la facultad humana integrada por la lengua y el habla. La primera es un sistema de signos arbitrarios, convencionales y de carácter social. El segundo es el acto individual de un hablante, de acuerdo a las normas establecidas por la lengua. Es el sentido personal de cada emisor.
Cada lenguaje tiene funciones muy especificas, pero esas funciones son comunes en cada uno de los caso 3 mil idiomas vivos que se usan en la actualidad en el mundo. Ellas son:
DE CARÁCTER EXPRESIVO (emociones y sentimientos).
APELATIVO (búsqueda de respuesta en el oyente).
DISCURSIVO (mensajes para afirmar, negar, preguntar, discurrir).
DE CONTACTO (expresiones que transmiten certeza en la sintonía).
METALINGÜÍSTICA (análisis del lenguaje).
ESTÉTICA (búsqueda de goce o emoción artística).
Dos brillantes ingenieros americanos, Claude Shannon y Warren Weaver, diseñaron uno de los modelos contemporáneos de la comunicación electrónica más usados, que explica por ejemplos, un circuito radiofónico o telefónico.
En la década de los años cincuenta, Wilbur Shramm adapta el modelo anterior al sistema de comunicación humana, sustituyendo trasmisor y receptor por comunicador y preceptor. De esta forma se establece que la fuente y el comunicador son una persona, que el preceptor y el destino son otra, y que la señal es el lenguaje. Y así nos ubicamos en el campo de la comunicación humana.
Introduce además el concepto de la codificación del mensaje. Es decir, la colocación de este en una clave cifrada, hecha por el comunicador; y el cifrado o interpretación de esa clave hecha por el preceptor del mensaje. Además el modelo contempla la percepción psicológica del significado del mensaje a diferencia de la recepción física del modelo de la comunicación electrónica.
Shramm contempla la posibilidad de que la fuente y el comunicador sean la misma persona, y que el preceptor y el destino sean la otra persona en la comunicación humana. Pero establece como condición esencial para la percepción del mensaje la experiencia común de comunicador y preceptor con la clave y el significado del mensaje. Si los campos de experiencia del preceptor no son los mismos que los del comunicador, no se comprende el significado del mensaje. La utilización de claves (lenguaje, por ejemplo) no comunes, produce las “interferencias semánticas”, así como las interferencias atmosféricas dificultan la recepción de los mensajes electrónicos.
Corresponde a David K. Balo, en los años 60, efectuar una modificación en el modelo, identificando al codificador y al descifrador independientemente. El codificador que traduce a una clave los propósitos de la fuente y el descifrador que traduce la clave en términos que puedan ser comprendidos por el preceptor. Este concepto es particularmente útil en la información periodística, en cuyo proceso pueden ser diferentes las personas que cumplen las funciones.
Tipos de comunicación
Para el desarrollo de este aspecto se parte de la concepción de Roger Malicot, quien señala que “la comunicación es la circulación del pensamiento en tres niveles: el primero, el unidimensional (consigo mismo); el segundo, el bidimensional (con los otros); y el tercero, el tridimensional (yo con los otros, el contexto y el medio)”.
A continuación indicaremos cada uno de ellos:
COMUNICACIÓN INTRAPERSONAL: A través de él se manifiesta una conversación profunda y personal. Un emisor es receptor de su propio mensaje. El hablante es, al mismo tiempo, audiencia.
COMUNICACIÓN INTERPERSONAL: Cuando dos o más personas hablan, se dice que hay una relación de comunicación. La comunicación interpersonal es la forma más primaria, directa y personal de la comunicación. Ella ofrece la oportunidad de que usted y otras personas puedan verse, compartir ideas, interrumpir o suspender el diálogo.
COMUNICACIÓN MASIVA: Al crecer la civilización y hacerse poderosa, sobrevino la necesidad de nuevos medios de comunicación, cónsonos con ese desarrollo. Así pues, al buscar el hombre su propia trascendencia, utilizó instrumentos que permitieron la extensión de sus sentidos.
El proceso comunicacional sigue siendo el mismo, lo que cambia son los medios utilizados. Ya no nos centramos solamente en las personas, sino que se requiere de ciertos instrumentos de carácter técnico para ampliar los contenidos de los mensajes y, en consecuencia, elevar el radio de acción y las posibilidades de lograr mayores efectos.
Esta explosión tecnológica de medios ha trasformado la dinámica social, ya que permite la transmisión instantánea de mensajes, a cualquier distancia y a un número infinito de
receptores.
El desarrollo de estos medios de comunicación masiva ha planteado nuevas formas de encarar el mundo, lo que constituye un reto para el hombre actual. El hombre está sometido a un continuo bombardeo de mensajes, de los cuales él no puede sustraerse. Los problemas que suscitan los medios de comunicación de masas son profundos y reflejan la transformación de nuestro mundo. El hombre actual es copartícipe de esa trasformación.
LA COMUNICACIÓN MODERNA
Uno de los avances más espectaculares dentro de las comunicaciones (comunicación de datos) se ha producido en el campo de la tecnología de los ordenadores. Desde la aparición de las computadoras digitales en la década de 1940, éstas se han introducido en los países desarrollados en prácticamente todas las áreas de la sociedad (industrias, negocios, hospitales, escuelas, transportes, hogares o comercios). Mediante la utilización de las redes informáticas y los dispositivos auxiliares, el usuario de un ordenador puede transmitir datos con gran rapidez. Estos sistemas pueden acceder a multitud de bases de datos. A través de la línea telefónica se puede acceder a toda esta información y visualizarla en pantalla o en un televisor convenientemente adaptado.
El desarrollo de las técnicas de telecomunicaciones (especialmente la telefonía, la radio, la televisión, y el uso de ordenadores) hacen posible que los sentidos del hombre extiendan su alcance alrededor del mundo.
Cada uno de los sistemas de telecomunicaciones resulta más adecuado para un determinado tipo de información, por ejemplo: para la información sonora: voz humana y música, lo más usual es el teléfono y la radiodifusión; para el envío de información escrita el telégrafo, el teletipo, telefoto, telefax. El sistema universalmente extendido de transmisión de imágenes animadas es la televisión. La teleinformática traslada datos entre un ordenador emisor y un terminal receptor, la cual puede ser otro ordenador, una pantalla o una impresora. Los sistemas de transmisión constan de dispositivos e instalaciones que cumplen distintas funciones, por ejemplo: unos son generadores de la señal, otras son repetidoras o ampliadores de la potencia, o correctores de distorsiones, decodificadores, etc.
Actualmente, dentro de los sistemas de comunicación por satélites y otros medios utilizados por el hombre, que tienen un avance considerable tenemos: la telegrafía, telefotografía, telefax, telefonía, cartel, la prensa, anuncios, cine, radio, televisión, publicidad, propaganda, y el uso de ordenadores o computadores.
BIBLIOGRAFIA:
Jameson, Frederic (1996): Teoría de la postmodernidad. Madrid, Trotta.
www.comunicacion.idoneos.com/index.php/Historia_de_la_comunicación
www.unisinu.edu.co/.../hacia_una_rrelectura_del_desarrollo_de_la_